Hablar de sobrepeso no implica solo un aspecto físico, sino
del resultado de acumular miedos, de hacernos fuertes
construyendo una coraza para enfrentar la vida, de escudarnos
en un cuerpo engrosas para soportar la adversidad, el dolor, las
penas: la vida misma.
Para adelgazar no basta con tener una correcta alimentación,
requerimos de un trabajo emocional profundo, que consiste en
encontrar nuestro propio centro, hacer una reconciliación a
fondo con nosotros mismos, y comenzar el proceso de amarnos.
El binomio perfecto para alcanzar el equilibrio del peso corporal
se compone de dos aspectos fundamentales: el conocimiento
real del tema de nutrición y un trabajo emocional profundo.
Este libro es una guía sutil -pero poderosa- que te ayudará a ser
congruente en tus acciones, para que el deseo por llegar a un
peso ideal se vuelva realidad.